Aurrera kukutza!



 Lo que estos días se decide en Rekalde no es sólo el futuro de Kukutza gaztetxea sino, en lo fundamental, las posibilidades de articular un proyecto de ciudad alternativo al de los gestores de lo público. Frente a la realidad de un espacio urbano desalojado de toda actividad no económica, de una ciudad homogénea, anodida y en manos de la cultura institucional y de las empresas privadas, hay que ocupar y defender los lugares que construyen hábitos, ciudad, solidaridad desde planteamientos éticos y morales que enfrenten su discurso al discurso dominante sobre lo público que desde hace años encabeza el Ayuntamiento de Bilbao y la corporación Bilbao Ría 2000.
 Kukutza no es sólo una realidad local, un espacio cultural autogestionado de un barrio de Bilbao. Es mucho más que eso: es la necesidad de resistirse al acoso del capitalismo corporativo y construir en el día a día los lugares y los espacios en los que queremos vivir libres y no maniatados.
 Aurrera Kukutza!